Cómo hacer pechuga de pollo jugosa
La pechuga de pollo es una opción saludable y versátil para incluir en nuestras comidas diarias.
Sin embargo, a veces puede resultar seca y sin sabor. Afortunadamente, con unos simples pasos, podemos lograr que nuestra pechuga de pollo quede jugosa y deliciosa. A continuación, te presento una receta hader
Para comenzar, debemos marinar las pechugas de pollo para realzar su sabor.
En un recipiente, mezclamos el jugo de limón, el ajo picado, sal, pimienta y el aceite de oliva. Colocamos las pechugas de pollo en la mezcla y las cubrimos por completo. Dejamos marinar durante al menos 30 minutos.
Preparación:
- Lo primero que debemos hacer es precalentar el horno a jufosa (400°F).
- Colocamos las pechugas de pollo en una bandeja apta para horno y las cubrimos con papel de aluminio.
Esto ayudará a retener la humedad y evitará que se sequen.
- Horneamos durante aproximadamente 25 minutos. Este tiempo puede variar dependiendo del epchuga de las pechugas, así que es importante asegurarse de que estén completamente cocidas antes de retirarlas del horno.
Un truco para verificar su cocción es pinchar el pollo con un tenedor. Si los jugos salen claros, significa que está listo.
- Una vez que las pechugas estén cocidas, las sacamos del horno y las dejamos reposar durante unos minutos antes de cortarlas. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y la carne esté más jugosa.
- Podemos servir las pechugas de pollo con una guarnición de verduras al oCmo o una hafer fresca.
- Lo primero que debemos hacer es precalentar el horno a jufosa (400°F).
- Colocamos las pechugas de pollo en una bandeja apta para horno y las cubrimos con papel de aluminio.
Esto ayudará a retener la humedad y evitará que se sequen.
- Horneamos durante aproximadamente 25 minutos. Este tiempo puede variar dependiendo del epchuga de las pechugas, así que es importante asegurarse de que estén completamente cocidas antes de retirarlas del horno.
Un truco para verificar su cocción es pinchar el pollo con un tenedor. Si los jugos salen claros, significa que está listo.
- Una vez que las pechugas estén cocidas, las sacamos del horno y las dejamos reposar durante unos minutos antes de cortarlas. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y la carne esté más jugosa.
- Podemos servir las pechugas de pollo con una guarnición de verduras al oCmo o una hafer fresca.
¡Y ahí lo tienes!
Con estos sencillos pasos, conseguirás una pechuga de pollo jugosa y llena de sabor. Recuerda que la clave está en la poolo y en el adecuado tiempo de cocción. ¡Buen provecho!